7 de Mayo – V Domingo de Pascua

Mis queridos amigos,

A medida que se acerca rápidamente el verano, hay muchos proyectos que la parroquia está a punto de emprender sobre los que quería informarles a todos en el boletín de hoy. El mayor de estos proyectos tiene que ver con la cúpula de nuestra iglesia. Hace dos años, tuvimos una fuga bastante grande en el lado norte de la cúpula. Después de que se arregló, los techadores vinieron a mí y me dieron una evaluación franca: “Padre, tal vez le quede un año en ese cúpula”. Este fue el resultado de muchas décadas de parches debido a filtraciones. El techo de la cúpula necesitaba ser reemplazado. Les pedí que por favor aguantaran hasta el verano de 2023 porque teníamos bodas programadas durante el verano que propusieron hacer el trabajo. Por la gracia de Dios, la cúpula a llegado al verano de 2023, y a partir del próximo mes los techeros comenzarán el proceso de reemplazar el techo de la cúpula, lo cual no es un trabajo fácil. Hace dos años, pudimos bloquear el horario de la parroquia y no programamos ninguna boda durante este verano. Esto no debe afectar la celebración de las Misas, bautizos y funerales en nuestra iglesia ya que toda la labor es exterior.

Una vez que se complete el trabajo a fines de agosto, se instalarán tejas españolas nuevas y, dado que se instalarán tejas nuevas en la cúpula, también se instalarán tejas nuevas en el resto del techo de la iglesia. Después de este proyecto, esperamos emprender algo que hemos estado frenando que es la iluminación de la cúpula para iluminar el cielo de Coral Gables tal como lo hace el Hotel Biltmore. La cruz del vértice está iluminada gracias a uno de nuestros benefactores, pero queremos iluminar la cúpula como se merece. Un ejemplo del trabajo de iluminación que realizaremos se puede ver en la Catedral de St. Mary, que se puede ver claramente cuando conduce por la I-95 por la noche.

Entonces, en este punto de la columna, podría estar pensando: “Padre, ¿este proyecto de techado no tiene un costo considerable?” Pues sí. Afortunadamente, lo sabemos desde hace algún tiempo y nuestro Consejo de Finanzas me ha ayudado a reservar dinero para este proyecto masivo. Esto se debe principalmente a la abrumadora generosidad que muestran en sus ofrendas todos los domingos. Todos ustedes han notado que las recaudaciones suben cuando se publican los totales en el boletín. Desde que comenzó la pandemia, Online Giving se ha convertido en nuestra principal fuente de donaciones, ya que más de la mitad de nuestros feligreses usan esta plataforma para dar su ofrenda dominical. Su generosidad junto con la afluencia masiva de bodas que hemos tenido en los últimos dos años y los importantes ingresos generados por Comber Hall nos han permitido emprender este proyecto de techado sin tener que pedir un solo centavo. Agradezco al Consejo de Finanzas por su guía, y una vez más agradezco a cada uno de ustedes por su mayordomía de esta parroquia que es su hogar.

Esto solo aborda el techo, pero como probablemente puedan imaginar con una iglesia que tiene 70 años y un salón, una escuela y una rectoría que tienen casi 100 años, hay innumerables cosas que deben arreglarse todos los días. Una vez que hayamos terminado con el techo, presentaré a la parroquia los proyectos que nuestro Consejo Parroquial ha alineado a continuación. Todos son muy emocionantes y no puedo esperar para compartirlos con ustedes, especialmente a medida que nos acercamos al centenario de la parroquia en 2026.

Una pequeña cosa que pido ahora, y abordé esto en una de nuestras misas la semana pasada: por favor, sean amables con nuestros bancos y reclinatorios. Ese es uno de los proyectos que tenemos en el horizonte. Lo crea o no, esos no son los bancos originales de 1954. Fueron instalados durante una renovación de la iglesia en el verano de 1987. Los bancos están literalmente en sus últimas patas. Así que cuando nos arrodillamos para la consagración y levantamos los reclinatorios cuando nos ponemos de pie para el Padre Nuestro, por favor colóquelos arriba o abajo con mucho cuidado. Todavía faltan algunos años para las nuevas bancas, así que tratémoslas con cariño por el tiempo que les queda.

Que Dios los bendiga a todos,

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